El Formula 1 Heineken Las Vegas Grand Prix 2025 no es solo una carrera: es la combinación perfecta entre el glamour del Strip y la ingeniería más extrema de la Fórmula 1. Del 20 al 22 de noviembre, el icónico boulevard de Las Vegas vuelve a transformarse en un circuito urbano de altísima velocidad para recibir la penúltima fecha del calendario. Un escenario donde cada detalle —temperatura, estrategia, carga aerodinámica— puede definir no solo la carrera, sino también el campeonato.
El frío: el enemigo silencioso del GP de Las Vegas
Si algo caracteriza a Las Vegas es que su carrera se disputa de noche, lo que convierte al frío en un factor determinante. Ningún otro circuito urbano combina rectas tan rápidas con temperaturas tan bajas.
Cómo afecta el frío al rendimiento
- Gestión de neumáticos: el asfalto frío dificulta llevar los compuestos a su ventana óptima. Un neumático frío ofrece poco agarre, aumenta los bloqueos de frenada y vuelve más inestable la fase de entrada en curva.
- Adherencia limitada: al ser una vía pública, el circuito tarda en engomarse. El grip inicial es bajo y puede durar varias sesiones, lo que complica la lectura del balance del coche.
- Riesgo tras el Safety Car: las relanzadas serán un desafío para todos. Un piloto que no caliente correctamente los neumáticos puede perder posiciones en segundos.
El dilema aerodinámico: ¿velocidad o estabilidad?
El trazado de Las Vegas, con sus 6.201 metros, incluye una recta de 1.9 km donde los monoplazas superan los 345 km/h. Esto empuja a los equipos a enfrentar un dilema clave:
Dos opciones, un solo objetivo
- Low Drag (baja carga aerodinámica): esencial para maximizar la velocidad punta.
- High Downforce (alta carga): necesaria para no perder demasiado tiempo en las frenadas y en las curvas lentas del sector inicial.
Encontrar el ajuste perfecto es uno de los mayores desafíos de este Gran Premio. Un auto demasiado rápido en recta puede sufrir en curva… y viceversa. Quien logre el equilibrio ideal tendrá una ventaja decisiva el domingo.
Estrategias posibles: 1 parada, pero con trampas
La carrera está pactada a 50 vueltas. Las bajas temperaturas podrían favorecer una estrategia de una sola parada, pero Las Vegas no perdona errores.
Estrategia más probable
- Salida con Neumático Medio
- Parada en la vuelta 15–20
- Final con Neumático Duro
El compuesto blando, aunque tentador por su rapidez inicial, suele degradarse demasiado rápido con el asfalto frío y puede comprometer toda la carrera.
El factor determinante: el Safety Car
Con muros tan cerca del límite de pista, la probabilidad de un Safety Car es elevada. Una neutralización puede cambiarlo todo:
- Ventana ideal para una parada “gratis”.
- Cambio completo del orden de carrera.
- Oportunidad para equipos con mejor reacción estratégica.
En Las Vegas, los estrategas pueden ganar —o perder— la carrera.
El campeonato entra en zona roja
El GP de Las Vegas 2025 se convierte en una cita clave porque es la penúltima del campeonato. Y todos los focos apuntan al duelo por el título.
McLaren: Norris, favorito absoluto
Lando Norris llega como principal candidato:
- Su constancia desde el parón de verano.
- Su adaptación a circuitos de bajo agarre.
- Su madurez bajo presión.
Si mantiene el nivel mostrado en Brasil y México, podría llegar a Abu Dabi con el título prácticamente definido.
Conclusión: una carrera impredecible bajo las luces del Strip
El Gran Premio de Las Vegas 2025 promete ser uno de los eventos más impredecibles del año:
- Rectas interminables.
- Neumáticos difíciles de calentar.
- Estrategias abiertas.
- Safety Car casi garantizado.
- Y un título que puede definirse en cualquier curva.
Un cóctel perfecto para una noche donde la velocidad, la tensión y el espectáculo estarán asegurados en la ciudad que nunca duerme.






