En la historia de la Fórmula 1 existen momentos que parecen sacados de una película. Uno de ellos ocurrió en 2009, cuando un equipo prácticamente desaparecido logró ganar el campeonato del mundo en su única temporada en la parrilla. Ese equipo fue Brawn GP, liderado por Ross Brawn y con Jenson Button como protagonista.
Un equipo que nació de la nada
A finales de 2008, la crisis financiera global golpeó a la F1. Honda, que había invertido millones en su escudería, anunció su retirada del campeonato. El equipo quedó al borde de la desaparición… hasta que apareció Ross Brawn, ingeniero británico reconocido por su éxito en Ferrari junto a Michael Schumacher.
Brawn compró la escudería por 1 libra esterlina (£1), la renombró como Brawn GP y decidió continuar en el campeonato con recursos limitados pero con un coche muy especial: el BGP001.
El secreto: el doble difusor
El arma principal del Brawn BGP001 fue un invento aerodinámico: el doble difusor.
- Este diseño aprovechaba un vacío legal en el reglamento y generaba mucha más carga aerodinámica que el resto de los coches.
- La ventaja era tan grande que en las primeras carreras parecía que el Brawn pertenecía a otra categoría.
- Más tarde, otros equipos copiaron la idea, pero Brawn ya había construido una ventaja decisiva.
Un inicio soñado
La temporada comenzó en Australia 2009 con un resultado histórico: Jenson Button ganó la carrera y su compañero Rubens Barrichello terminó segundo.
- Button ganó 6 de las primeras 7 carreras, consolidando una ventaja enorme en el campeonato.
- Mientras Ferrari y McLaren sufrían con la nueva normativa, y Red Bull apenas emergía, Brawn dominaba con un coche rápido, equilibrado y confiable.
Un presupuesto limitado
A diferencia de Ferrari, McLaren o Red Bull, Brawn GP tenía un presupuesto muy ajustado.
- Esto significaba que no podían actualizar el coche con tanta frecuencia.
- En la segunda mitad de la temporada, Red Bull con Vettel y Webber comenzó a recortar diferencias.
- Sin embargo, los puntos ganados por Button en la primera parte del campeonato fueron suficientes para resistir el ataque.
La consagración en Brasil
El 18 de octubre de 2009, en el Gran Premio de Brasil, Jenson Button terminó quinto y aseguró el campeonato mundial de pilotos.
- Brawn GP también se llevó el título de constructores, cerrando un año de ensueño.
- Fue el primer y único título del equipo, ya que al finalizar la temporada la escudería fue adquirida por Mercedes.

El legado de Brawn GP
Aunque Brawn GP solo compitió un año, su impacto fue enorme:
- Jenson Button cumplió el sueño de ser campeón del mundo.
- Ross Brawn demostró su genialidad técnica y estratégica.
- Mercedes-AMG Petronas nació de esa compra y, años después, dominó la F1 con Hamilton y Rosberg.
La historia de Brawn GP es considerada por muchos como el mayor milagro de la Fórmula 1 moderna. De estar al borde de la desaparición, a convertirse en campeones del mundo en apenas una temporada.






